Llevaban veinte días andando por el desierto blanco de la Antártida. No dejaba de nevar. El cansancio y la falta de nutrientes empezaban a hacer mella en sus cuerpos doloridos. Todavía faltaban unos ciento ochenta kilómetros para llegar al campamento. Había que tomar una decisión. Xavier, Douglas y Ninnis habían salido de la base, en Tierra Adelia, para cartografiar Tierra Victoria que se hallaba a unos quinientos kilómetros. Marcharon a pie con trineos arrastrados por fieles perros huskys. A punto de llegar a destino, Ninnis resbaló en el hielo precipitándose por una profunda grieta arrastrando con él al trineo con la mayoría de las provisiones y a la mitad de los perros. Había que tomar una decisión y los dos supervivientes la tomaron a pesar de la grave violación que suponía, tal resolución, para su moral. De...
La serendipia es la colisión entre el azar y el conocimiento.